martes, 22 de marzo de 2016

No solo es el destino...también esta el camino

"Marcado a fuego" estaba este día en el calendario "por culpa" de los amigos de Izarbe Mendi Taldea; al planear tan jugosa salida al curioso lugar de la gruta Helada de Lecherines, que en el valle de Canfranc se forma cada invierno en una combinación casi artística de agua y frío.

Aunque el tiempo viene inestable, con nevadas y nubes por todos lados; afilamos crampones,piolet y dientes; y parece que al final para el domingo el tiempo se pone un poco de nuestro lado dejándonos un poquito de disfrute. Aunque con algo mas de  riesgo de aludes  por la nieve nueva, y  una contrarreloj por el mal tiempo que para la tarde se espera.

Gruta Helada de Lecherines( Foto de elpirineodejose)

El día comienza oscuro y con las calles recién echadas, pero con un tiempo por ahora en seco; así que la cosa a priori parece pintar bien.
A la hora vamos llegando a la quedada hasta juntarnos tod@s l@s valientes, aunque se nos  hace un poquillo tarde y  resuena la mala noticia de que la entrada podría estar tapada por la nieve y mas con la nueva nevada. Aun así partimos  hacia las alturas pirenaicas ,inmersas en un tardío invierno, rumbo a Canfranc...

"La sonrisa de la montaña". Con buen nombre se bautizo al lugar.
Ruta de una dificultad media-alta, con una distancia de 13'5 km  y un desnivel de 900 m (Sin llegar a la gruta). Las pendientes son moderadas con algunas algo mas exigentes; a partir de la mallata de Lecherín la pendiente toma mayor inclinación.
La mayor parte del recorrido discurre entre arbolado y  entre gran cantidad de regachos y alguna barranca. Se despeja por completo en la mallata de Lecherín.
Prácticamente toda la ruta  sigue la GR 11.1 por senderos en la mayor parte y algún tramo de pista; encontrando menos marcas conforme ganamos altura. Esta se abandona en la mallata de Lecherín, tomando una amplia canal.
Material Invernal y raquetas para la aproximación. Encontraremos un par de fuentes; una antes de llegar a la mallata de Gabardito, y otra en la mallata de Lecherín.

Mapa Intento a la Gruta helada de Lecherines.

Al punto de la mañana llegamos a nuestra base en Canfranc, bajo enormes murallones rocosos que nos flanquean mientras terminamos las pesadas mochilas,cargamos las raquetas en ella y desayunamos , cogiendo fuerzas para la faena. 

Nos ponemos en marcha por la GR 11.1, adentrándonos entre el arbolado y en el barranco de los meses;y tras una antigua construcción la nieve hace acto de presencia. 
Atravesamos el vivo cauce por una estrecha presa y entre"chicanes" a un lado y a otro, remontamos el bonito barranco a la sombra de los arboles, aunque poco sol había que tapar, hasta dominar sobre todo el valle de Canfranc sin apenas despeinarnos.
Aun no podemos relajarnos pues queda "una pechadica", con las raquetas colgadas de la mochila,por la pista bien sembrada de nieve hasta la majada de Gabardito, donde ya se intuyen ligeramente "los reinos de altura" y tenemos una parada para echarnos "los zapatones de nieve".

Mas cómodos sobre "el capón de nieve", cruzamos tranquilamente la majada de Gabardito entrando en el barranco de Campón. 
Discurriendo entre arboles, vadeando caudalosos regachos, sufriendo enganchones que nos querían frenar y alguna caída tonta en la nieve ; nos hacen una entretenido camino entre majadas. 
La aventura continua abriéndonos huella el guía con gran esfuerzo a la vez que se busca un buen paso para atravesar la barrancada; bajando,subiendo y saltando algún obstáculo salimos de la zona de arboles y damos con un puente de nieve sobre el cauce. 
Con sumo cuidado y ligeros, lo atravesamos de uno en uno, sin chapuzones, y abriéndose ante nosotros la majada de Lecherín, que nos recibe con "la sonrisa de la montaña" y una espesa capa de niebla que nos impide diferenciar el fin de la montaña del principio del cielo.

Brevemente recuperamos el aliento y reponemos fuerzas junto al refugio forestal,;partiendo rápidos, que el tiempo se nos ha echado encima, con componente NE atravesando la majada y plantarnos ante " el remate final". 
Nos enfrentamos a la dura pendiente en la que el avance es penoso, debido a la nieve reciente, y sobre los 1820 m nos paramos, pues viene un parte con gran inclinación. 
Mientras el guía inspecciona el terreno; esperamos en zona segura, desde la que se oye un estruendo en las laderas del Pico Riguelo y cae una pequeña colada de nieve. Al poco le vemos descender con ligera dificultad, ya que la nieve tiende a correrse a su paso; por lo que la cosa no se ve nada clara y toca abortar el ataque; una pena el no llegar al destino, pero mas importante es volver.


Descendemos "al través" por la Majada hasta la cornisa, bautizada como "la sonrisa", para echar un bocado y descansar con tranquilidad, aunque el tiempo parece querer despacharnos. 
Aunque se estaba"mas agusto que un arbusto" toca ponerse en marcha hacia abajo. Unos pocos nos descolgamos ,bajando a toda pastilla siguiendo "la raqueteada vía" hasta la primera majada, donde nos reagrupamos con los que van " de cháchara". 
Ya todos juntos seguimos para abajo, apurando al máximo el usar las raquetas, y una vez sin ellas del tirón hasta Canfranc, no habiendo conseguido el objetivo pero si disfrutando del camino.

Para rematar una "mini-tardía-comilona" en Villanúa que nos la hemos ganado y hay que recuperarse para la siguiente.. y desde luego para volver a la Gruta Helada de Lecherines.


La ruta en fotos 


Los enormes paredones de Canfranc nos reciben...
... mientras ultimamos "los mochilones" ,"llenamos los depósitos·...
... y los de Canfranc nos llenan el día de nieblas.
Nos metemos en faena por la GR...
... pillando nieve ya desde cotas bajas.
Con unos giros "p'aqui" y otros "p'alla"...
... dominamos en nada sobre el valle de Canfranc.
.Aun nos queda un poco de "tirada"...
... hasta la Majada de Gabardito...
... donde toca echarse raquetas.
Vamos ganando altitud  rumbo a la segunda majada...
...adentrándonos en "tierra de nieblas".
Surcamos las pendientes por el duro bosque alpino...
...lleno de  bonitas barrancadas..
... que atravesamos meticulosamente...
... dejándonos en la Majada de Lecherin, cargadita de nieve y niebla.
Hacemos un pequeño parón para recuperarnos..
... y enfilamos hacia el ultimo esfuerzo del día.
La cosa pinta fea con niebla y un terreno poco seguro, que el guía investiga...
... mientras en sitio seguro, esperamos al veredicto ...
...  que finalmente al no ver seguridad,  nos quedamos sin cueva...
... pero disfrutamos de una rica comilona y un entretenido ratico.
Algunos ponemos pies  en polvorosa hacia abajo, descolgándonos un poco...
... y el tiempo parece querer regalarnos ligeras vistas.
Una vez reagrupados , nos "merendamos" la ultima bajada en "un tris"...
... llegando al final de la ultima invernal de esta temporada... pero dan comienzo "las primaverales".








##DeL RìO##









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